Y tú, ¿te has planteado alguna vez organizar tu propio menú semanal? Puede que te parezca algo sin importancia, pero lo cierto es que planificar tu menú te ayudará a llevar una dieta más equilibrada al evitar que improvises día a día, y además, ¡te ayudará a ahorrar dinero cuando vayas a comprar porque te ceñirás solo a sus ingredientes! Si quieres conocer los secretos para hacer un menú semanal perfecto, ¡lee este post con atención!
Trucos para hacer un menú semanal completo
Para elaborar un menú semanal completo y saludable solo tienes que apuntar en un papel los días de las semanas, añadir las columnas ‘Comidas’ y ‘Cenas’, y seguir estos sencillos consejos:
- Prioriza las legumbres sobre la carne: las legumbres son una alternativa muy saludable a las carnes, por lo que puedes incluirlas cuatro o cinco veces a la semana y reducir así el consumo de carne. Así no solo comerás mejor sino que además ¡ahorrarás dinero!
- Elige ingredientes versátiles: cuando estés preparando tu menú, procura priorizar los platos cuyos ingredientes sirvan para muchas cosas. Por ejemplo, el arroz, el atún en lata, las verduras frescas, las habichuelas en conserva… pueden cocinarse de muchas maneras y combinarse con muchos otros ingredientes. En cambio, si compras ingredientes muy específicos para una receta en concreto, es probable que debas tirar los restos porque no te servirán para ningún otro plato y se te estropearán antes de que los puedas consumir.
- No te olvides de la guarnición: si eres de los que come platos únicos, por ejemplo una hamburguesa o una tortilla, recuerda que las guarniciones son importantes para que no termines aburriéndote de tus comidas y para saciarte. ¿La mejor guarnición? ¡La verdura! Puedes ir variando y cocinarla un día a la plancha, ensalada, otro estofada, otro a la vinagreta… Otra opción perfecta son los hongos como las setas o los champiñones, que puedes preparar al horno, a la plancha, como un carpaccio…
- No comas dos días seguidos lo mismo: por ejemplo, si el lunes vas a comer pasta y por la noche vas a cenar pescado, procura no consumir pasta ni pescado al día siguiente. ¿Por qué? ¡Para que no acabes aborreciendo tu dieta!
- Si te sobran huecos, rellénalos con huevos o verdura: si ves que para acabar tu menú semanal te faltan huecos por rellenar, complétalos con platos basados en el huevo (tortilla, revuelto, huevo pasado por agua…) o las verduras.
¿Ves qué fácil? Y tú, ¿a qué esperas para diseñar tu propio menú semanal?
